Carlos García Valdés

Nacido el 16 de enero de 1.947, se licencia en Derecho por la Universidad Complutense de Madrid en 1.969, se especializa en derecho penitenciario y obtiene el doctorado en aquella ciencia en 1.974. Un año después publica No a la pena de muerte”, “Régimen penitenciario de España. Investigación histórica y sistemática” y «La pena de muerte: 6 respuestas«.

A petición del Ministro de Justicia Landelino Lavilla Alsina propone textos para la redacción de los artículos 15 y 25 de la Constitución española de 1.978. Obtiene la plaza de adjunto a la cátedra de Derecho penal de la Universidad de Salamanca cuando su titularidad es alcanzada por su maestro el profesor Enrique Gimbernat; por entonces presidia el grupo de trabajo que preparaba la futura Ley Orgánica General Penitenciaria.

El asesinato de Jesús Haddad por miembros del Grapo, provoca su nombramiento como Director General de Instituciones Penitenciarias en marzo de 1.978, a la edad de 31 años. Sus primeras palabras como Director fueron «Yo voy a sacar la nueva ley Penitenciaria» «Mi actitud será oírlo todo y a todos, escuchar cuanto me tengan que decir, y verlo todo desde los lugares mismos. Voy a seguir la reforma penitenciaria con el recuerdo de la emprendida por Jesús Haddad.»  «Es público que desde hace mucho tiempo mi caballo de batalla, lo que considero la clave de la reforma penitenciaria, es la judicialización de las cárceles,» «Voy a potenciar al máximo el régimen de cárcel abierta, y convertir en excepción real el régimen de seguridad. Voy a dignificar social y económicamente el cuerpo de funcionarios,…»

Visitó muchas prisiones «Viejos y tradicionales edificios radiales, muchos reconvertidos de antiguos destinos, bien iglesias, conventos, cuarteles o almacenes marineros. Ante mi vista desfilaron edificaciones sobrias y tristes, duras, con años de servicio, no pensadas muchas de las mismas inicialmente para contener hombres penados. Otras sí, pues eran construcciones específicas, pero de más de un siglo…»

El 10 de abril de 1.979 consigue salir ileso de un atentado de los Grapo al ser repelida la agresión por su escolta, a la quien él mismo pudo advertir «José Manuel, vienen a por mí». En Septiembre del mismo año se publica la Ley, tras ser aprobada por unanimidad en el Congreso de los Diputados y aclamada en el Senado. Poco después, el 11 de octubre del mismo año cesa en el cargo una vez cumplido con éxito su compromiso.

En los años siguientes ocupa numerosos cargos administrativos y docentes, entre los que destacamos los de Secretario General Técnico del Ministro Adjunto al Presidente para la Coordinación Legislativa, Director General del Centro de Estudios Judiciales, Vicedecano y posteriormente Decano de la Facultad de Derecho de la Universidad de Alcalá, Catedrático de Universidad, con fecha de inicio en 1986 y Director del Departamento de Fundamentos del Derecho y Derecho Penal, de la Facultad de Derecho de la Universidad de Alcalá, desde septiembre de 2002 .

Durante su vida profesional ha mantenido una relación frecuente con las Instituciones Penitenciarias, bien redactando para el Ministerio de Defensa Dictamen sobre la adecuación de la Legislación Penitenciaria Militar a la Ley General Penitenciaria, como miembro del Consejo Rector de la Escuela de Estudios Penitenciarios por el Consejo de Universidades, de la Comisión Técnica para la redacción del temario de las oposiciones a los distintos Cuerpos Penitenciarios, Vocal de la Comisión Técnica de Reforma del Sistema de Penas, Miembro de la Comisión Técnica para la redacción del temario de las oposiciones a los distintos Cuerpos Penitenciarios, Presidente de la Comisión Técnica para la relectura de la Ley Orgánica General Penitenciaria o Presidente de la Comisión Técnica para la redacción de un Código Deontológico de los profesionales de Instituciones Penitenciarias. Sin duda alguna García Valdés ha sido el gran modernizador de las Instituciones Penitenciarias de España en las postrimerías del siglo XX.